
Se pone el sol. Acaba el verano. Los Cúmulus Humilis, situados en alturas entre 700 y 1.800 metros, son conducidos por los vientos que soplan en superficie. Están formados por gotitas de agua, y no tienen presencia de cristalitos de hielo. Anuncian el buen tiempo imprescindible para rodar. Los marineros y realizadores prudentes los tienen en cuenta.